IRACUNDOS

La interna de Peñarol está que arde

La situación en tiendas carboneras es complicada. Llamó la atención pese a estar en primer lugar que no fuera acompañado de acuerdo a su lugar en la tabla. Era una tarde realmente espectacular y daba como para que el estadio tuviera más público. Es que la tozudez del técnico motiva que los hinchas no soporten más algunas situaciones como por ejemplo las presencias de Bologna y Torres. No bancan más y menos a Torres a quien despidieron con una rechifla generalizada para el paraguayo y Da Silva.

Pero además en las tribunas se siente un clamor popular de disconformidad y los hinchas lo manifiestan permanentemente con cantos que tienen varios destinatarios. Y cada tanto la tribuna se acuerda de muchas situaciones que los han tenido como protagonistas pero responden señalando por ejemplo que con bombos y banderas no matan a nadie.

Pero además de todo ello, Da Silva que está en el medio de la critica de todos, aumenta la molestia al no concurrir a la conferencia de prensa alimentando los comentarios. Ayer el gerente deportivo de Peñarol salió con los “tapones” como cuando jugaba y pretendía restar un balón de su área. Este pegó duro a diestra y siniestra y seguramente generará reacción en otras tiendas aludidas. En medio de todo este problema que tiene el carbonero aparece la situación del próximo partido, trascendente ante Defensor Sporting.

Si bien los jugadores de Peñarol y cuerpo técnico sostienen que no tienen inconveniente de jugar en cualquier cancha no todo es tan fácil, porque mientras Defensor hace fuerza y presión para llevar al grande al estadio Franzini, los dirigentes aurinegros se mantienen a la expectativa. No está nada dicho porque todo está ad referéndum de la Policía y ella en definitiva determinará si se juega el domingo de tardecita en el Franzini o si en cambio se busca otra alternativa. Todos especulan pero hasta cabe la posibilidad de que se juegue en el estadio Centenario. Así como lo lee.

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