MEDIDAS. Industria busca alternativas a las trabas argentinas

Subsidios a vestimenta y nuevos mercados a automotores

Pese a los fuertes reclamos de la industria de la vestimenta, el sector ha sido uno de los que más atención ha recibido del gobierno en los últimos cinco años, y durante este primer semestre del año, sus exportaciones hacia Argentina han crecido.

Este fin de semana, la Cámara de la Vestimenta sostuvo que las ventas hacia Argentina cayeron un 18% en volumen en el semestre ante el mismo período de 2011, y una caída de 2% en dólares.

Diferencia de datos

Sin embargo, los datos de la Dirección Nacional de Aduanas (DNA) hasta el 22 de julio, indican que en lo que va del año, las exportaciones de vestimenta hacia Argentina aumentaron un 16%. Según la DNA, hasta el viernes 22 de julio las ventas hacia Argentina de vestimenta sumaron 15,35 millones de dólares, cuando en igual período del año pasado fueron por 13,22 millones.

El rubro que sí descendió fuertemente fue el de acolchados y similares, que cayó un 56%, de 9 millones de dólares a 3,98 millones en el mismo período.

Por otra parte, el informe del Banco Central del Uruguay sobre las exportaciones cumplidas en los cinco primeros meses del año, sin especificar destinos, presenta un aumento del 4,3% en las exportaciones de prendas de vestir medidas en dólares, en comparación con igual período del año pasado.

Los datos de la Cámara Industrial de la Vestimenta no coinciden con los datos presentados por Aduanas, y los voceros de los empresarios insisten en reclamar al gobierno que adopte medidas ante las trabas argentinas y asuma políticas activas de promoción a la industria.

El presidente de la Cámara de la Vestimenta, Elbio Fuscaldo, pronosticó que las exportaciones de la industria textil caerán este año entre un 20 y 25% con respecto al año pasado, y señaló que la ley de promoción de la industria, que otorga 27 millones de dólares al sector en subsidios diversos, es tardía y de poca monta.

Una de las principales críticas del sector vestimenta apunta a las trabas argentinas por la demora en otorgar licencias de importación.

Si bien a principios de año el otorgamiento de las licencias de importación se acumuló por más tiempo del normal, poco a poco se han ido liberando, aunque los rubros han tenido tratamientos diferentes. La Cámara admitió que en junio aumentaron las exportaciones ante la liberación de las licencias de importación en el vecino país.

El rubro que más ha sufrido el freno de las compras desde Argentina ha sido el automotor, que bajó sus exportaciones hacia ese país un 39%, de 79,4 a 48,6 millones de dólares en el período de enero al 22 de julio. Otro rubro que perdió, en menor medida, fue el papel, que bajó sus ventas 8%, de 35,1 a 32,4 millones de dólares en el mismo período.

Medidas para la vestimenta

Desde la crisis de 2009, que impactó en todos los sectores económicos, la vestimenta y textiles han sido beneficiados por una serie de medidas. La primera medida de 2009 fue aumentar el adelanto del IRAE a los productos importados, del 4 a 8%. Este año se volvió a aumentar del 8 al 15%.

También en 2009 se aumentó el porcentaje de devolución de impuestos indirectos del 2 al 4%.

En aquel entonces se mejoraron las condiciones de prefinanciación de exportaciones, reduciendo el plazo de 12 meses a 30 días. Igual medida se adoptó el pasado año.

Asimismo, en 2010 se aprobó un decreto que reserva una parte de las compras públicas para productos nacionales.

A través de la Dirección Nacional de Industria se impulsó el apoyo al sector vestimenta para mantener sus mercados externos, para la capacitación y búsqueda de nuevos mercados. Además se acordó la cofinanciación de proyectos a través de fondos para la vestimenta.

Recientemente se reglamentó y se puso en marcha la entrega de subsidios a la vestimenta, según la ley de promoción del sector aprobada en diciembre del año pasado, y se acordó adelantar el pago de las subvenciones contempladas en la ley 18.846 a las empresas que lo soliciten y estén calificadas. También se acordaron medidas para mejorar la inserción en mercados exteriores, a través de la trazabilidad de la vestimenta (que combate la informalidad).

Otra medidas acordada este año fue reducir de 12 a 10 meses el plazo para el sobro de la devolución de impuestos a las exportaciones. Se acordaron con Aduanas criterios más severos para el ingreso de mercaderías del exterior, como calzados y textiles, como forma de proteger la industria.

Por otra parte, el Ministerio de Industria acordó subsidios a la tasa de interés en la financiación de pymes que renueven tecnología, y se acordó financiar la contratación de una consultoría para buscar nuevos mercados de exportación.

Este 2 de agosto vence el plazo para que las empresas del sector vestimenta se anoten para recibir el subsidio otorgado por la ley 18.846, y que en este año repartirá hasta 5 millones de dólares, destinados a confeccionistas, trabajadores y financiación de proyectos. Deben inscribirse las empresas que participen total o parcialmente en la fabricación o importación de prendas de vestir, cualquiera sea su estado o destino (exportación, reexportación o comercialización en plaza).

En tanto, desde la Dirección Nacional de Industria se realiza un llamado a consultoría para explorar nuevos mercados a la vestimenta y el sector textil. En principio, el interés estaría en países de la región, y ya se han buscado contactos con Colombia, Chile y Perú.

Mercados para autos

En esta semana el subsecretario de Economía, Luis Porto, y el director nacional de Industrias, se reunirán con representantes de la empresa Chery, la más afectada por la lentitud en Argentina de otorgar las licencias de importación (hay 900 vehículos esperando para ser entregados) a los efectos de repasar la situación con Argentina y comenzar a plantear la posibilidad de dirigir a otros destinos esa producción.

Una posibilidad cierta de mercado es Venezuela. Uruguay ya tiene un convenio con ese país para exportar mil automóviles y 200 camiones, y el gobierno pretende ampliar ese cupo.

En Venezuela hay problemas para la entrega de vehículos cero kilómetro a los clientes que los adquieren por distintas formas de financiación. La espera puede llegar hasta un año entre que se concretó la financiación y la entrega de vehículos, y en algunos casos mucho más.

Las armadoras norteamericanas de vehículos en Venezuela trabajan en turnos restringidos, y eso obliga al país a importar vehículos, algunos desde Colombia donde esas mismas armadoras trabajan en 3 turnos de 8 horas diarios.

La cumbre del Mercosur, a celebrarse en Brasilia este lunes y martes, que concretará el ingreso de Venezuela como socio pleno del bloque, será la ocasión para que las delegaciones de Uruguay y ese país inicien negociaciones al respecto.

La alternativa del mercado venezolano para los vehículos ya fue admitida por las autoridades uruguayas y comunicada a la empresa Chery. Este fin de semana el ministro de Industria, Roberto Kreimerman, dijo que el tema estará en la agenda.

Venezuela ha incrementado sus compras a Uruguay en este año, y ya se ubica como el cuarto destino (si se excluye la zona franca de Nueva Palmira) de nuestras exportaciones, aunque los principales rubros son alimentos (carne, arroz y lácteos). En el primer semestre de este año se exportó hacia Venezuela por 208 millones de dólares frente a 120 millones del mismo período de 2011.

Si se excluyen las importaciones de petróleo de ese país (que representa casi el 20% del total de crudo importado) la balanza comercial es superavitaria, ya que las importaciones de Venezuela suman apenas 6 millones de dólares en el primer semestre.