opinión

¿Por qué no van a protestar a las carnicerías?

Como a cualquier ser humano me indigna el maltrato animal.

Aún así, en un país cuya principal entrada es la industria cárnica, basta ya de fanatismo, ignorancia e hipocresía.

Igual que otras religiones como la judía y la musulmana, los afroumbandistas durante los retiros espirituales comemos carne de animales previamente consagrados. Cuando hacemos nuestras “obligaciones” rituales en Kimbanda o Culto Africano, nos está prohibido consumir animales faenados en los frigoríficos -matados en serie con descargas eléctricas o a palos porque de alguna manera hay que sacrificarlos para poder comer su carne- e inevitablemente manoseados por diversas personas antes de llegar al comensal. Por eso se matan o sacrifican si quieren decirlo así, en un ceremonial afro religioso y por un sacerdote o una sacerdotisa previamente preparados. Debe realizarse dicha tarea con el menor sufrimiento posible del animal pues tal cosa invalida el rito, no preñados, y siempre se trata de animales comestibles de los que comúnmente se compran, ya muertos por supuesto, en los supermercados.

Los que dicen que va a ir a hacer alboroto contra el culto a Iemanjá según ellos porque repudian el sacrificio de animales, ¿Por qué no van a protestar a las carnicerías o frigoríficos, a las avícolas o contra las empresas pesqueras?

Una gallina muerta en la esquina; de la cual no nos hacemos cargo porque improvisados hay en todo rubro; no es nada al lado de las exhibidoras de diferentes carnes en lujosos shoppings. Esto sí que sería un espectáculo macabro según sus parámetros. Nunca se meten con eso.

A fines de diciembre murieron 150.000 pollos literalmente asados vivos por el calor de los galpones con techo de cinc, hacinados para engorde antes de la faena… ¡eso es tortura! Tampoco vi ninguna campaña contra esto por Facebook.

En realidad tales agitadores son simples intolerantes anti-umbandistas: en su propaganda dicen que somos “el demonio” y que Dios no nos acepta, ¿qué protectora de animales tiene estos contenidos? Practican el odio social, son violentos y quieren colectivizarlo. ¿A quién se le ocurre tal grado de provocación!? Ir a Iemanjá a las playas a protestar contra los umbandistas un 2 de febrero, es como entrar a un domicilio ajeno y manifestar contra el dueño de casa el día de su cumpleaños! Están buscando la confrontación directa. Arriesgan la seguridad del entorno y la integridad física y moral de la población de todas las edades y clases sociales, nacionales y extranjeros, que ese día se nuclean espontáneamente a disfrutar una fiesta que ya es de las familias uruguayas y forma parte de sus más relevantes tradiciones.

Algunos no comen carne y denigran y agreden a quienes lo hacen. Cualquier nivel de fanatismo es grave; lo que sea lo que ingieren para sobrevivir depredan la naturaleza pues la vegetación también es vida asesinada cuando la consumen. Tal vez sería más honesto de acuerdo a sus radicales posturas, dejarse morir. ¡Ojo! Los cadáveres también ensucian…

Esta convocatoria a molestar a los afroumbandistas el 2 de febrero es persecución religiosa lisa y llana, y en Uruguay eso está tipificado como delito, ya que van a donde se están celebrando cultos a ultrajar y a interrumpir, pisoteando postulados constitucionales y artiguistas que proclaman la libertad de cultos “en toda su extensión imaginable”.

Reivindico la convivencia y el respeto entre personas -no solo hacia los animales- y leyes que protegen y penalizan la agresión a las diferentes creencias arts 149, y 304 al 306 C.P., leyes 17.817 y 18.471 que protege la faena ritual. Habrá escribanos, gente filmando, fotografiando y decenas de miles de testigos.

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