editorial
La presidenta argentina, Cristina Fernández, hizo publicar en dos diarios ingleses una carta abierta dirigida al premier David Cameron con copia al secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon. En la misiva, la presidenta pasa revista brevemente a la historia de la controversia que su país mantiene con Gran Bretaña desde 1833, al tiempo que reclama el cumplimiento de las varias resoluciones de la ONU que reclaman el fin del colonialismo en todas sus formas y exhortan a ambas partes en litigio a buscar una salida negociada al conflicto.
El archipiélago de las Malvinas es un enclave británico en Sudamérica, vergonzoso resabio del colonialismo más rapaz. Es por donde se la mire insostenible la postura del Reino Unido que se considera con soberanía sobre ese grupo de islas del Atlántico Sur: las Malvinas son parte indiscutible de la República Argentina en razón de su proximidad al territorio continental de esa nación hermana.
Y no es de recibo aducir que los lugareños (los kleppers), al ser consultados, han expresado su deseo de seguir perteneciendo a Gran Bretaña; son colonos ingleses, ¿qué otra respuesta es dable esperar de ellos? Es la geografía la que indica que las islas son argentinas, y no los plebiscitos.
El Uruguay ha sido tradicionalmente defensor de la soberanía argentina sobre las islas, apoyando siempre al país hermano en sus legítimos reclamos, independientemente del color político del gobierno de turno. Cuando el general Galtieri embarcó a su país en la absurda aventura de ocupar militarmente las islas, muchos uruguayos apoyaron la causa a pesar de tratarse de la decisión de un gobierno dictatorial.
Felizmente, ninguno de los gobiernos posteriores al de la Junta Militar ha barajado siquiera la posibilidad de una solución bélica al conflicto. Antes bien, han centrado su reivindicación por los canales civilizados de la diplomacia.
Uruguay ha declarado su más irrestricta solidaridad con el reclamo argentino, comprometiéndose a alinearse con la nación vecina en todas las instancias internacionales. Pero las declaraciones necesitan ratificarse con hechos concretos; la solidaridad debe manifestarse en acciones y actitudes. Eso es precisamente lo que hizo el gobierno de Mujica cuando prohibió que naves enarbolando el pabellón del enclave británico atraquen en puertos uruguayos. Es una medida de elemental amistad con una nación perteneciente, por otra parte, al bloque regional que Uruguay integra; sin contar que se trata de una decisión de la Unasur resuelta en noviembre de 2010.
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instruc13
5 enero, 2013
7:52
No por repetirlo una y otra vez las Malvinas serán argentinas. Dada la distancia entre las islas y el territorio argentino, incluido su mar territorial, el reclamo geográfico frente a la Gran Bretaña, no es extremadamente fuerte. Para un caso de este tipo, se puede mencionar a la isla de Groenlandia, la que está a 30 kms de Canadá y a unos 3,000 de Dinamarca, pero Canadá nunca la reclamó y Groenlandia es danesa. Lo mismo sucede con la isla de Samos, la que está más cerca de Turquía, pero es de Grecia. Pero si de todas maneras el gobierno argentino quiere reclamarlas, le convendría hacerlo sobre esta base, porque hacerlo en base a la descolonización es meterse en un camino que de antemano lleva a la derrota, dado que la población nativa es claramente de origen británico y partidario de la soberanía británica sobre las islas.
Armando Muniz
5 enero, 2013
8:14
¿Y LA ISLA MARTIN GARCIA, QUE ESTA A SOLO 3,5 KILOMETROS DE LA COSTA URUGUAYA?
Y HABLANDO DE PAPARRUCHADAS, QUE SE SABE DEL DRAGADO EN SOLITARIO O CONJUNTO Y DE LA CONTAMINACION DEL RIO URUGUAY?.
Libertad
5 enero, 2013
19:30
ESTE TEMA DE LAS MALVINAS SON ARGENTINA ME HUELE MAL.
NO SE PORQUE, SUENA A NEGOCIADO EN INTERIORES.
EN REALIDAD NO SE PORQUE NOS ALIAMOS CON ARGENTINA EN ESTE TEMA, A ELLOS NO LES IMPORTAMOS UN PITO.
EL LIO QUE ESTÁN HACIENDO POR EL DRAGADO DEL MARTÍN GARCIA ES UNA MUESTRA TOTAL.
USAN PUNTA DEL ESTE PARA TODO EL SEDIMENTO QUE NOS TRAEN DE SU ENORME PAÍS.
LO PEORCITO EN EL ESTE. QUE CARAJO ME IMPORTAN LAS MALVINAS. ¡BASTA!
Mylenka
5 enero, 2013
20:05
Más allá de opiniones, de si Las Malvinas son argentinas o no, a mi lo que me rechina por todos lados es que así como los militares provocaron la guerra con Inglaterra, como una medida política para buscar el apoyo de los argentinos.
Cada vez que algún gobierno argentino (no importa cuál) utiliza el reclamo de la soberanía de Las Malvinas, lo hace como medida política para fortalecerse y mejorar su imágen ante la población.
Lo lamentable que ningún gobierno se acuerda de los argentinos, que fueron enviados a pelear en una guerra sucia y que estaba perdida de antemano, siendo algunos casi niños, con apenas 18 años.
Siguen reclamando una pensión por ser veteranos de guerra, con todo derecho y muchos de ellos han vuelto enfermos y/o mutilados y no han conseguido trabajo. Otros (lamentablemente) no han podido superar ese desamparo y se han quitado la vida para no soportar más injusticia.
Creo que antes de reclamar la soberanía deberían acordarse de esos soldados que están desamparados.
Salu
5 enero, 2013
23:34
Me gustaría decir primero que estoy totalmente de acuerdo con el comentario de Armando Muniz, si usamos el criterio geográfico la Martin García es nuestra. Argentina desde sus orígenes fue una nacion de tipo colonizador. Después también quería expresar que los plebiscitos sí que son los que determinan la nacionalidad, de hecho es lo que hace legítimo el derecho de autodeterminación de los pueblos.
Finalmente la prohibición de atracar barcos de las malvinas en Montevideo me parece que no es muy neutral que digamos y el Uruguay tiene fama de ser neutral y de defender el derecho de autodeterminación y soberanía de los pueblos.
Salú