opinión

Chile: derrota del pinochetismo en elecciones municipales

El mismo día, 28 de octubre, en que se consagró una gran victoria de la izquierda en las elecciones municipales en Brasil (como lo señalamos en la nota del día 31, con especial referencia a San Pablo), las fuerzas de izquierda y centroizquierda obtuvieron otro triunfo destacado en las elecciones municipales de Chile, propinando un duro revés a los sectores pinochetistas enquistadas en el gobierno de Sebastián Piñera.

Tres semanas antes, el 7 de octubre, se había registrado la reelección de Chávez por cifras categóricas en Venezuela, configurando en conjunto tres decisiones soberanas de nuestros pueblos en la línea del nuevo curso progresista en América Latina, absorbiendo la contraofensiva de la derecha. Con la particularidad adicional de que la elección chilena pone en primer plano la reconquista del gobierno con la candidatura ascendente de Michelle Bachelet, cerrando el ciclo ominoso de la derecha y el pinochetismo resurrecto.

El rasgo más relevante de estos comicios (que se caracterizaron además por una de abstención del 57%, en un sistema de voto voluntario) es la derrota de candidatos pinochetistas que tienen vara alta en el actual gobierno. En términos generales, la oposición de izquierda superó en votos al oficialismo, en cifras de 43,65% a 38,03%. A la vez, varias votaciones en comunas clave resultaron emblemáticas. En la alcaldía de Santiago Centro, en la capital, se impuso Carolina Tohá, ex ministra del gobierno de la socialista Michelle Bachelet, desalojando del municipio al ultraconservador Pablo Zalaquett. El padre de la vencedora fue un ministro destacado del gobierno de Allende, y falleció por torturas en plena dictadura pinochetista.

Del mismo modo, en el municipio capitalino de Providencia, la candidata independiente de izquierda Josefa Errázuriz venció por 55,21% a 44,65% al ex coronel del ejército y ferviente partidario de Pinochet, Cristián Labbé, quien gobernó el municipio en los últimos 16 años. El éxito de su campaña se debió en gran parte a la actividad desplegada por las organizaciones sociales. En Ñuñoa, comuna de clase media de la capital santiagueña, Maya Fernández, nieta de Salvador Allende (hija de Beatriz, la hija más “política” del presidente mártir) derrotó a Pedro Sabat, cercano al pinochetismo y que también gobernaba desde hace 16 años.

La oposición ganó asimismo en Concepción y en varias comunas más de la capital como La Reina, Recoleta, Huechuraba e Independencia.

Estas elecciones guardaron una íntima relación con las manifestaciones multitudinarias que conmovieron a Chile en el último período, en particular de los estudiantes por una educación gratuita y de calidad, las que debieron enfrentar una durísima represión. Estas movilizaciones pusieron en jaque al gobierno, a sus ministros y a los alcaldes afines. Por ejemplo, Zalaquett amenazó con sacar a los militares a la calle para frenar las marchas estudiantiles en su jurisdicción, y Labbé acusó a un colegio que había sido ocupado por mujeres en términos de “puterío”. La ciudadanía les dio la respuesta.

La oposición se integró en esta elección en dos frentes: el de la Concertación, vertebrado en torno al Partido Socialista y la Democracia Cristiana, y un nuevo agrupamiento denominado Por un Chile Justo, compuesto por el Partido por la Democracia (PPD), el Partido Comunista (que avanzó y conquistó posiciones), el Partido Radical y la Izquierda Ciudadana (ex Cristiana)

En un municipio de la Araucanía ganó la elección un joven médico de origen mapuche, egresado de la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM) de Cuba. Tal fue el caso de Juan Carlos Reinao, electo en la comuna sureña de Renaico, cuyo nombre significa agua de cueva en lengua mapuche.

En el campo de la derecha, el fracaso electoral revolvió todo el avispero con un cobro de cuentas recíproco y la vista puesta en las elecciones de 2013. Dice un comentario: “Las caras de los líderes de la derecha chilena lo decían todo. Habían sido vencidos en diversas comunas emblemáticas a manos de la oposición y los temores de perder el gobierno se acrecentaron con una base innegable en las urnas”. Ese es el tema. El comentario agrega: “Cuanto más cae la derecha, más sube Bachelet, que sigue liderando las encuestas para un nuevo período en La Moneda”. Desde Nueva York, la ex presidenta felicitó a las y los candidatos triunfantes.

Volver arriba