Bastó que asomase la crisis económica en ese edén que según dicen sería España, para que los viejos y ancestrales nacionalismos, no solo el vasco sino que ahora se suma nada menos que el catalán, vuelvan como en los viejos tiempos. Hubo recientemente en Barcelona manifestaciones multitudinarias pidiendo independencia y soberanía para Cataluña.
Por supuesto que los nacionalistas vascos, siempre buenos vecinos de los catalanes, se anotaron. O sea, los sentimientos patrios tanto eskaldunes como catalanes, contra el imperio, vuelven a aflorar. Esto en el mundo siempre fue una constante histórica. La Unión Soviética, segunda potencia en su momento en el mundo, mucho más que España por supuesto, sufrió similar fenómeno separatista cuando trastabilló económica y militarmente. Todo a pesar de estar respaldados en movimientos políticos como el comunismo con grandes ejércitos y toda la tecnología bélica moderna de punta. ¿Quién podía pensar que la diminuta Lituania o Estonia podrían desafiar al poder ruso y lograr su independencia?
Ningún régimen en la historia por poderoso que haya sido, se eternizó en el poder sin tener raíces nacionales con tradiciones ancestrales, idiomas propios e idénticos vínculos raciales. La sumatoria de injertos siempre cayó tarde o temprano. Aunque se vomiten conceptos neoliberales, monárquicos, democráticos o totalitarios. Por más argumentos que se expongan siempre terminan por imponerse las razones nacionales. Los vascos nunca se sintieron ni españoles ni franceses. Lo mismo los catalanes. Hay afinidad de sentimientos nacionales libertarios.
Los vascos responden a su ikurrinia, y los catalanes, según nos informan, llegan hasta la posibilidad de sacar al club Barcelona de la liga española de fútbol para hacer una propia. Tema que no es menor por lo que representa el deporte y ese club, económica y políticamente en su tierra. O sea, lo que a la postre adquiere dimensiones definitivas, son los sentimientos ancestrales e históricos de unos y de otros. Costumbres, emblemas, familias, idiomas propios, tradiciones, en países milenarios como son vascos y catalanes. Si entre nosotros, los americanos, países con apenas 200 años de existencia, cada vez que algún imbécil habla de patria grande, la enorme mayoría no solo resiste sino que le surge el nacionalismo: ¡Soy celeste! O en otros casos peores, como fueron o como son ecuatorianos y peruanos; o lo que es más aun, Brasil y Argentina. ¿Es razonable pensar que puedan unirse en una patria grande? Cae por lo absurdo y lo delirante. Con más razón vascos y catalanes que existían miles de años antes que España y Francia fueran naciones.
El despertar de Cataluña con obvio apoyo vasco es la verdadera razón del “chucho” o alarma española. No pueden eludir la crisis sin el apoyo de esos dos pueblos, por cierto los más industriosos y prósperos del anémico imperio godo. No son los tres etarras aislados que están en Uruguay los que pueden alterar el poder español. Sino el mantener el poder económico que se desploma y un sentimiento nacional que crece rápidamente en ambas naciones. La verdadera razón es el concepto de libertad y soberanía que reflota en pueblos sometidos durante centurias.
El grito “gora Euskadi askatuta”, en los vascos, no perdió vigencia.
Primer triunfo en el torneo para Central Español y justamente ante un rival directo en la lucha por la permanencia: Fénix. El palermitano, hundido en la tabla, sumó 6 puntos y comienza a ilusionarse con quedarse en la “A”.
Danubio sumó su tercera derrota consecutiva, esta vez en el clásico ante Defensor, y quedó último en la tabla tras las victorias de Cerro Largo y Central. Mientras “la viola” lidera, el equipo de JR cada vez está peor... parece que la culpa no era del “Pecho” Sánchez.
Martín Cauteruccio llegó a la cima de la tabla de goleadores del Torneo Inicial gracias a su anotación frente a River Plate. Quilmes venció al “millonario” 1-0 y nuestro compatriota alcanzó las 6 conquistas en el campeonato.
El diputado José Bayardi habló de la ley de faltas y confirmó que habrá nuevas sanciones de trabajo comunitario para la mendicidad con acoso, las picadas y la conducción bajo los efectos del alcohol. Además, indicó que podría haber juzgados dedicados exclusivamente a dichos procesamientos.
Néstor Delgado, subdirector de la Secretaría de Comunicación de Presidencia, falleció ayer luego de una severa enfermedad.
El sindicato de Pluna SA pretende que el gobierno conforme una empresa aérea paraestatal y reincorpore a 492 trabajadores. “O es el Estado o es Venezuela”, afirmó la dirigente Sabrina Acevedo, quien sostuvo que el accionar de López Mena “dejó mal parado al Poder Ejecutivo.”