Una industria “compleja” y en una situación “frágil”

El 2012 es un año “desafiante” para la industria de la aviación, aseguró Tony Tyler, director general de la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA, por sus siglas en inglés). La organización nuclea 240 aerolíneas que comprenden el 84% del tráfico aéreo mundial.

Durante las reuniones anuales de la Asociación, Tyler aseguró que para este año se espera un ingreso de 631.000 millones de dólares, y una ganancia de “sólo” 3.000 millones, lo que marca un margen de ganancias de 0.5%.

Sobre las razones establece que el alto precio del petróleo está entre las principales del crecimiento “anémico” de la rentabilidad. De cualquier manera apunta a que el “mayor y más inmediato” riesgo es la crisis en Europa.

En ese sentido señaló que la rentabilidad de la industria está “al filo de la navaja”. Aseguró que si cae sólo un 1% los ingresos, los 3.000 millones de dólares de ganancias esperados pueden “rápidamente convertirse en 3.000 millones de pérdidas”.

Igualmente advirtió que se espera para este año un incremento de pasajeros del orden de 1.200 millones en relación al año pasado. Gracias a esto “algunas aerolíneas están haciendo dinero, muchas están luchando, y muchas sucumbieron”, aseguró Tyler. Entre ellas nombró el caso de la española Spanair y la húngara Malev. “Nuestros miembros tienen realidades diferentes, pero la lucha diaria para mantener los ingresos por encima de los costos es común a todas”, subrayó el director de la organización.

Destacó el rol de la aviación en el crecimiento mundial y agregó que las economías modernas “no pueden crecer, prosperar, o crear empleos si no están conectadas a las oportunidades globales a través de la aviación”. Subrayó que esto “debe hacer que las aerolíneas y los gobiernos sean socios fuertes en el apoyo al éxito de la aviación”.

 

Datos

Tyler ilustró la importancia de la aviación con números. En 2011 volaron en el mundo 2.800 millones de personas en 35.000 rutas, conectando 3.800 aeropuertos, estimó que la aviación genera 57 millones de empleos y mueve 48 millones de toneladas, con un valor equivalente a un tercio del comercio mundial.

Pero a pesar de estos números, Tyler advierte que la situación de la industria es frágil.

“En la última década los ingresos de las aerolíneas totalizaron 4,6 billones de dólares”, aseguró el director. Agregó la industria está entre las que más crece en el mundo, aunque advirtió que el mejor margen de ganancias del último siglo fue 2,9%. Y el resultado global es una pérdida neta de 16.000 millones de dólares.

 

Costos

El diario americano Wall Street Journal se preguntó en un avión que carga 100 pasajeros cuánto paga cada uno. Consultó a la aerolínea norteamericana US Airwaysm y a la firma consultora Oliver Wyman para responder a la pregunta.

La aerolínea creó un vuelo hipotético de 100 pasajeros. Dicho vuelo es interno de Estados Unidos, y cada viajero pagó en promedio 146 dólares por la ida y la misma cifra por la vuelta, más 18 dólares por viaje en tasas y agregados por viaje. El estudio se basó en datos anuales cerrados a marzo de este año.

La conclusión del matutino estadounidense  es similar a la de Tyler: el combustible es el mayor costo. El estudio estima que de los cien viajeros, 29 solo pagan el combustible. En segundo lugar se ubican los salarios, que representan a 20 pasajeros. Esto significa que casi la mitad de los ingresos van a parar a los salarios y el combustible exclusivamente. El informe señala que en los aviones más grandes ese porcentaje puede incluso llegar a ser mayor.

El tercer mayor costo es la propiedad de los aviones, ya sea por la compra, leasing o alquiler. 16 personas cubrirían ese coste, incluyendo los seguros.

14 cubren los impuestos estadounidenses, que se han incrementado para financiar los cambios en los sistemas de seguridad luego del atentando del 11 de setiembre del 2001.

Once de los cien pasajeros significan los costos de mantenimiento, nueve cubren un rubro al que llaman “otros”, que va desde el servicio a bordo, hasta compensaciones por la pérdida de equipaje. Dos personas cubren los gastos de aterrizaje, lo que deja en menos de un pasajero la ganancia. En este sentido el estudio del Wall Street Journal concuerda con los datos de la IATA, la rentabilidad del sector es menor al 1%.