tiempos modernos

La perra tuvo cría

“Con esta modalidad golpista se nos quiere colocar en la situación de discutir sobre un animal, que algunos dicen que no es perro, pero que ladra y tiene cola: por eso es perro, por eso es golpe de Estado”, escribí hace unos días en LA REPÚBLICA, el 25 de junio pasado, sobre la destitución del entonces presidente paraguayo Fernando Lugo.

Esta tesis se ha generalizado aunque no todos hagan referencia a la imagen del perro. Hoy podemos asegurar que la perra tuvo cría, que se trasladó de Asunción a Soriano y sin necesidad de presentar pasaporte.

¿Qué quiero decir con esto? Que en determinados sectores de la sociedad latinoamericana – incluida la nuestra- hay condiciones políticas, ideológicas y culturales para que el vientre del fascismo aún esté fértil.

En esta semana nos enteramos de que el subjefe de Policía de Soriano, Ernesto Carreras, publicó en su muro de Facebook: “Copiemos a los paraguayos. Chau Pepe!” (por Mujica). De inmediato el funcionario, a quien la sociedad le dio las armas para proteger a la población y no entrometerse en la política, fue correctamente separado del cargo por el ministro del Interior.

En estos días se supo, además, que se está investigando la posible existencia de grupos nazis en nuestro país. Y como si fuera poco, el general golpista paraguayo Lino Oviedo dijo que el presidente uruguayo José Mujica sufre de alzheimer.

Son demasiadas coincidencias para dejarlas pasar, más cuando desde filas de los partidos tradicionales, por parte de personajes de segunda o tercera, se corren rumores de todo tipo sobre la incapacidad del Presidente de la República para conducir los destinos del país.

Estamos ante una situación compleja, donde por ahora los conspiradores son personajes de poca monta, pero que no pueden ser ignorados porque hasta los más petisos crecen.

Lo más increíble es que el sistema político, incluido el propio Frente Amplio, no haya reaccionado en defensa de la institución presidente de la República, que ha sido agredida por personajes extranjeros y nacionales, este último funcionario del instituto policial.

Aún es tiempo para actuar dentro de la institucionalidad y del entendimiento democrático, con el fin de crear un clima político civilizatorio que abra paso al debate para los cambios y las transformaciones.