desde Paysandú a andrómeda

Ex sacerdotes se contactan con “extraterrestres”

“Estamos de vuelta, somos nosotros”, escuchó Eleuterio Bravo junto a otros ex sacerdotes católicos e integrantes de su grupo en la chacra de Paysandú donde viven hace 20 años. Cuando salieron afuera vieron a varias naves extraterrestres sobrevolando la casa. De eso hace dos meses y se trató del segundo contacto con seres de Andrómeda que Bravo ha tenido en su vida. El primero ocurrió en Chile hace años cuando él y otros tres sacerdotes tuvieron contacto con los seres de Andrómeda, y a raíz de divulgar esa experiencia fueron expulsados de la iglesia católica, según aseguró Bravo en diálogo con LA REPÚBLICA. Pero hoy asegura que “las religiones no están para liberarte y salvarte sino para que sigas dormido y no puedas romper la prisión en la que estás encerrado”. La galaxia Andrómeda se está acercando a nosotros a unos 300 kilómetros por segundo, y se encuentra a unos 2.500 millones de años luz de la Tierra y según Bravo, tiene una tecnología 2.500 años superior a la nuestra.

Para Bravo 2012 es el comienzo del fin de los tiempos y se avecinan cambios en el Planeta Tierra de una profundidad que al momento es difícil de imaginar. Pero podríamos pensar, para tener una idea que abarca todo el sistema económico de hoy día, por supuesto el político y la relación será distinta en todos los niveles, “Hoy la tierra está enferma de materialismo económico, ellos pasaron por lo mismo. Este es un plan de los seres de Andrómeda para salvar al planeta”, asegura Bravo, que tiene 70 años y hace 29 vive en Uruguay. “La gran babilonia va a caer. Se acabó el tiempo. Tiene los días contados y va a ser purificado para la aparición de una Nueva Tierra”.

“El contacto hace dos mese en Payando fue psicográfico”, es decir que los seres de Andrómeda se manifiestan mediante escritura que los propios terrícolas llevan a cabo. “Sentimos ganas de escribir y ellos se manifiestan así. Quieren ayudarnos, prepararnos para el cambio en el que entraremos en la tercera dimensión, ellos viven en la cuarta dimensión, o sea están fuera del tiempo”, explicó Bravo que es licenciado en filosofía y teología.

El primer contacto en Chile había quedado trunco pero este en Uruguay “cierra el círculo”, según Bravo que ahora está abocado a escribir un libro donde cuenta sus experiencias y la de su grupo ya que piensa que ha llegado la hora de dar a conocer esta situación a los terrícolas.

Consultado sobre por qué cree que lo eligieron a él y al grupo de personas que lo acompañan Bravo dijo “son miles a los que han contactado. La primer vez nosotros les dijimos que se habían equivocado sin duda, que éramos unos simples sacerdotes y ellos nos dijeron que no, que era a nosotros a quienes habían venido a buscar”, contó Bravo que también ha estudiado Física Cuántica.

 

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