Lo tragó la noche; Desesperada búsqueda

La aeronave perdió todo contacto con la base minutos después de despegar a las 19.45 horas del miércoles desde el Aeropuerto de Carrasco, teniendo previsto aterrizar en Ezeiza, Argentina, unos 45 minutos después. Ayer, al cumplirse las 24 horas de búsqueda ininterrumpida que se hacía con seis aviones y varias embarcaciones se cortó, y se continuará hoy con las primeras luces del día.
Las condiciones climáticas, el estado de la nave y el contenido de la carga son elementos claves que están siendo analizados para establecer el motivo de su desaparición.

 

Estaba previsto que hoy se sumara a la búsqueda el buque Oyarbide, que tiene un sistema de resonancia que permite hacer una búsqueda en profundidad en las aguas, pero lamentablemente no podrá hacerlo porque las condiciones del mar no permiten la utilización de los equipos científicos de la embarcación, que permanecerá a la orden a la espera de un cambio climático. La Fuerza Aérea ayer avistó una caja en la costa, frente al balneario Cuchilla Alta, quizá de las que llevaba el avión desaparecido, pero fue imposible recuperarla por el mal clima.

La aeronave perdió contacto a dos millas al suroeste de la Isla de Flores, unos 21 kilómetros del Aeropuerto de Carrasco. En la Fuerza Aérea se entiende que el accidente se debió al fuerte viento del miércoles y por el tiempo transcurrido se cree que la nave, que voló unos 15 minutos, pudo haber caído en el Río de la Plata. Se está fuera del tiempo de expectativa de supervivencia en el agua por las bajas temperaturas reinantes.

Ayer se supo, en tanto, que a través del radar se registraron comportamientos erráticos en el rumbo del avión, pero no hubo comunicación alguna de parte de sus tripulantes. Un punto que llama la atención es que la baliza de impacto no envió señal satelital alguna. La baliza se puede accionar manualmente o al chocar debería enviar una señal automática, pero nada de esto ocurrió

La única certeza que se tiene es la última ubicación que dio el radar: es el último punto real que tienen las autoridades.

Las condiciones climáticas, el estado de la nave y el contenido de la carga que llevaba son elementos claves que están siendo analizados para intentar establecer el motivo de su desaparición.

El avión pertenece a la empresa Airclass Líneas Aéreas que realiza transporte de remesas y cargas, y tanto el piloto (ex integrante de la Fuerza Aérea) como el copiloto, tienen la característica de ser personas con mucha experiencia, muchísimas horas de vuelo y personas de amplia confianza de la empresa. Airclass operaba frecuentemente para la compañía de transporte de carga DHL.

El avión – Fairchild Metro, biturbo-hélice, con capacidad para hasta 20 pasajeros, iba por la Ruta Sargo a 3.000 pies al sur y hasta donde se sabe, siempre se mantuvieron al sur. Al perder contacto se cortó el enlace por radio y por radar y aunque se intentó ubicarlos vía celular los esfuerzos fueron vanos.

Desde las 21.50 horas del miércoles un avión C-212 Aviocar y un helicóptero AS- 365 Dauphin de la FAU están haciendo intensas tareas de búsqueda, las que también se han coordinado con el Centro Coordinador de Rescate de la Armada Nacional para el envío de unidades de superficie, búsqueda por mar a la que también se sumó ayer la Asociación Honoraria de Salvamentos Marítimos y Fluviales (ADES).

A medida que la búsqueda no arrojó resultados el área se ha ido extendiendo. Loureiro, encargado de relaciones públicas de la FAU, destacó que el equipo de rescate enfrenta “condiciones marginales” para realizar la tarea.

Las condiciones climáticas que se registran en la región dificultan las tareas de búsqueda del avión que este miércoles perdió contacto con los radares. “Las condiciones de búsqueda no son las mejores”, dijo Loureiro, vocero de la Fuerza Aérea.

A las 20 del miércoles el Departamento de Control de Tránsito Aéreo de Carrasco anunció que se había perdido hacía cinco minutos “todo tipo de contacto”, tanto por radio como por radar.

“El avión no ha tenido contacto con ningún centro de control, tampoco ha habido ninguna información de ningún otro medio que pudiera hacer saber que los tripulantes llegaron a alguna otra zona y no pudieron comunicarse por otro medio”, indicó Loureiro. El vocero de la Fuerza Aérea indicó que “es una situación que aparenta ser bastante complicada”.

Por su parte el comandante de Austral Carlos Rinzelli explicó que el turbo hélice bimotor Fairchild Metro es un tipo de avión muy seguro que hace 20 años que vuela en territorio argentino y uruguayo sin ningún tipo de inconvenientes, según medios de prensa argentinos.

Asimismo indicó que “las condiciones climáticas no representaban un impedimento para volar”, por lo que desestimó que haya caído por un problema de congelamiento, ya que la nave “volaba a baja altura, donde ese efecto no se produce”.

Rinzelli precisó que “cuando un avión falla el piloto se declara en emergencia, con lo cual, si después se corta la comunicación, al menos hay un indicio de lo que pudo haber ocurrido”.

“Cuando el avión no informa nada y desaparece es porque se produjo un imprevisto que no dio tiempo para comunicar la situación”, remarcó.

En ese sentido, el especialista estimó que “existen situaciones en que este tipo de aviones transportan cargas no declaradas, que muchas veces incluyen material inflamable o que explota”.

“Si un avión despega y no informa ningún inconveniente y de pronto explota, la torre de control no se entera de lo ocurrido”, vaticinó el piloto.

Por tal motivo, Rinzelli hizo hincapié en esperar a encontrar los restos de la nave para establecer los motivos de la desaparición y agregó que este avión no cuenta con caja negra sino con un sistema que registra los últimos 30 minutos del vuelo.

La tripulación.

El piloto del avión es Walter Rigo, uruguayo de 63 años de edad, de alta experiencia con más de 16.000 horas de vuelo. Es un piloto retirado de la Fuerza Aérea con vasta trayectoria en líneas aéreas comerciales tanto en Uruguay como en el exterior. El copiloto es Martín Rivas, de 34 años, con más de 500 horas de experiencia en vuelo.

El último contacto del piloto con Control

“Estamos virando a Sargo”

Los últimos contactos previos al despegue.:

Piloto – Buenas noches pista x4, 260 grados, 7 grados la temperatura.

Control – Buenas noches ok. Dame con Montevideo va un vuelo. Un abrazo y hasta luego.

Minutos más tarde la Torre de Control intenta comunicarse al ver que la nave se iba de su curso:

Control – Buenas noches por derecha directo Sargo 100,

Piloto – Estamos virando a Sargo,

Control – Bien

Más tarde se registra la comunicación con un avión que estaba por salir y es advertido para espere en tanto se había perdido el rumbo de la nave de Airclass:

Control – Alfa sierra Montevideo tenemos situación en aeronave que despegaron de Carrasco y se perdió contacto por el momento prevean una demora no sé hasta cuándo. Estamos tratando de ubicarlos vía celular.

Las olas y el viento

En tanto, el capitán del navío de la Armada de Uruguay Sergio Piqué, apuntó que “hay vientos de hasta 30 nudos y un mar grueso con olas de hasta 2 metros. Esto dificulta los rastrillajes”, afirmó.

“Hasta ahora no hemos tenido suerte en encontrarlos y hemos agotado las instancias de comunicación radial con otras plataformas que estuvieron navegando en la zona”, dijo Piqué. “Esto dificulta los rastrillajes. El ruido generado en los radares por el mar es impresionante y se ven afectados”. “Vamos a seguir trabajando y vamos a seguir haciendo esfuerzos para tratar de llegar a buen puerto en esta situación”, afirmó Piqué.

Una empresa uruguaya con 15 años

Airclass Líneas Aéreas, es una empresa uruguaya fundada a fines del año 1996 por sus actuales dueños, contando con los permisos de la Dirección Nacional de Aviación Civil e Infraestructura Aeronáutica del Uruguay (Dinacia) como así también de la Dirección de Transporte Aerocomercial de la República Argentina para la realización de vuelos comerciales Regulares y No Regulares entre ambos países.

Airclass fue proyectada hace más de 25 años, cuando sus dueños comenzaron a incursionar en esta área. Primero como pilotos, luego creando la necesidad del transporte aéreo en las más importantes empresas del país, o adquiriendo experiencia en el extranjero, principalmente en EEUU. La empresa comenzó con una aeronave de reducido porte, pero que ocupó una parte del mercado en la cual no existía una demanda satisfecha. Rápidamente se incorporaron aeronaves turbohélices, lo que permitió ampliar la capacidad de transporte de la empresa.

Al incorporarse el primer turbohélice, se cruzó por primera vez en la aviación uruguaya comercial el Atlántico Norte, con aeronaves de reducido porte, hecho hasta ahora no superado en nuestro país. El Embraer Bandeirante fue adquirido en Finlandia, a la firma Skargardfly.

A través de su operativa, la empresa entre los años 1997 y 2004 ha cumplido con un porcentaje mayor al 99.5 % de los vuelos en horario para DHL, operando diariamente entre Uruguay y la República Argentina.

A principios del año 2004, se incorporó otra aeronave turbohélice, esta presurizada, que le permite a la empresa explorar otras áreas que no han sido hechas hasta ese momento, siendo la única empresa uruguaya según la Certificación RAU 135 en operar este tipo de aeronaves.

Un avión con todos los adelantos

El Fairchild Metro es una aeronave que cuenta con todos los adelantos en la cabina de pilotaje actuales, tales como: pantallas de Vidrio EFIS en lugar de instrumentos tradicionales; alerta de terreno GPWS; alerta de proximidad de aeronaves TCAS; grabador de cabina, CVR; piloto automático. Esta nave puede adquirir grandes altitudes en muy poco tiempo y desarrollar alta velocidad, como también descender en poco espacio de manera tal de aprovechar el aire calmo de las alturas, siempre manteniendo la cabina a una altitud que no moleste a los pasajeros, tal es así, que en los vuelos que normalmente es utilizada esta aeronave, la cabina mantiene la presión del suelo como si nunca hubiera ascendido evitando de esta manera los incómodos dolores de oídos de los pasajeros.

La prensa argentina

LA RAZÓN: “El avión no ha tenido contacto con ningún centro de control, tampoco ha habido ninguna información de ningún otro medio que pudiera hacer saber que los tripulantes llegaron a alguna otra zona es una situación que aparenta ser bastante complicada”.

MINUTOUNO.COM: “Cuando el avión no informa nada y desaparece es porque se produjo un imprevisto que no dio tiempo para comunicar la situación”, remarcó. “En ese sentido, existen situaciones en que este tipo de aviones transportan cargas no declaradas, que muchas veces incluye material inflamable o que explota”.