Hill trabajó durante la década de 1970 para la familia mafiosa Lucchese, en Nueva York, y su historia fue narrada por el escritor Nicholas Pileggi en el libro “Wiseguy”, en el que se basó Scorsese para su famosa película de 1990 protagonizada por Ray Liotta.
Además, Hill se había convertido en un informante del FBI. Sus testimonios ayudaron a encarcelar a docenas de compañeros mafiosos y formó parte del programa federal de testigos protegidos durante casi una década. Sin embargo, no pudo mantenerse al margen de la peligrosa vida callejera y fue expulsado del programa federal por tráfico de drogas en la década de 1990.
Hill, quien aseguraba haber probado todas las drogas posibles, publicó su propia historia en un libro titulado “Gangsters and Goodfellas: The Mob, Witness Protection, and Life on the Run” en 2004.
“Su corazón simplemente dijo basta”, informó su novia Lisa Caserta y agregó que Hill sufría una enfermedad coronaria desde hacía años.