Mujica sí que va en coche

Viajó desde su domicilio en Rincón del Cerro en su “fusca”, acompañado de su perra Manuela hasta El Pinar para participar de la celebración de los 10 años de la categoría “Superescarabajos”.

El presidente de la Asociación Uruguaya de Volantes (AUVO), Álvaro Faroppa, destacó la significación de que por primera vez un presidente de la República concurra al referido circuito, y lo tomó como un reconocimiento a la actividad automovilística.

“Notable”, fue el calificativo que utilizó el presidente Mujica para identificar la celebración de los diez años de la categoría Superescarabajos.

 

El mandatario participó en una vuelta, que en realidad fueron dos, de homenaje a la categoría. Lo hizo conduciendo un automóvil Volkswagen celeste. El vehículo estaba en muy buen estado de conservación y fue el que abrió la marcha con el número 1.

Posteriormente, Mujica siguió las instancias de la competencia acompañado de directivos de la Asociación Uruguaya de Volantes (AUVO). Durante su desarrollo se interiorizó del proyecto que tiene esa institución para remodelar el tradicional circuito de El Pinar.

Al término de la competencia, el jefe de Estado “bajó la bandera a cuadros” que lucía la firma de todos los participantes. La dupla conformada por Fernando Echegorry y Víctor H. Morales ganó la prueba.

Minutos antes, en la zona de boxes, Mujica recibió una platina de parte de autoridades de la AUVO en agradecimiento a su participación en un domingo que tuvo una gran asistencia de espectadores.

Al retirarse del autódromo, ubicado en la costa de Canelones, Mujica reconoció que el automovilismo es una actividad que significa el sustento de muchas personas y que atrae a mucho público.

En ese sentido, Faroppa asintió e indicó que la AUVO tiene una flota de 120 automóviles deportivos en todas sus categorías. Agregó que la actividad genera cinco puestos de trabajo por automóvil, entre los directos y los indirectos. Además, destacó que se trata de un deporte que está asociado “indisolublemente” al turismo.

El VW presidencial

Mujica es dueño de un Volkswagen, del modelo conocido popularmente como “Escarabajo”.

Este automóvil de 1987 lo compró en 2004 y, según los registros de la Intendencia de Montevideo, tuvo una deuda de patente que se pagó en enero de 2010, cuando Mujica ya era presidente electo de Uruguay, que con multas llegó a 31.245 pesos.

Se estima que el precio de mercado de este coche ronda los U$S 2 mil.

Fuera de la agenda presidencial, Mujica recurre al viejo “escarabajo” para realizar algunos trámites personales. Se lo ha visto yendo a sufragar, junto a su esposa, en este auto en cada instancia electoral. Incluso ha salido a cenar en él sin tener una custodia particular. Para la vuelta de honor de ayer el “fusca” del Presidente fue revisado minuciosamente y probado el sábado.

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