Sábado, 21 de Julio de 2012. Montevideo - Uruguay
Edición Impresa
Iniciar sesión Registrarse

Atlántida

Isha está bajo la lupa

Una secta de las más difundidas a nivel mundial tiene el "privilegio" de tener a su líder instalada en Uruguay.

PUBLICADO el Domingo 6 de mayo, 2012

Se trata de la Fundación Isha, radicada en el país desde 2005.

Su líder, Isha, también estuvo en la Feria del Libro de Buenos Aires. La mujer es una australiana que vive en Uruguay.

Según “La Diaria”, un ex graduado del método Isha, que salió de la organización en 2009, le inició un juicio por “secta destructiva” y reclama que le devuelvan el dinero de la venta de un apartamento de su propiedad.

En 2006, había firmado un poder en favor de la organización, que le reclamaba despojarse de todas sus posesiones materiales. El ex maestro trabajó varios años en la institución, sirvió a Isha en la apertura de una sucursal mexicana, para luego darse cuenta que estaba bajo “presión psicológica”. La denuncia fue presentada el viernes 20 de abril en el juzgado de Atlántida por el abogado argentino Héctor Navarro.

A causa del padecimiento de métodos de manipulación, Navarro acusa a Isha de “reducción a la servidumbre”, “estafa”, “ejercicio ilegal de la medicina”, e “inducción al suicidio”.

Isha nació en Australia en 1962, fue estrella de rock y domadora de caballos, según su biografía oficial. Su verdadero nombre es Jennifer Lee Duprei, pero también es conocida como Heather Isobel Judd, el nombre con el que fue rebautizada luego de su búsqueda espiritual.

En Argentina, varios famosos han adherido a sus enseñanzas. Los actores Raúl Taibo y Graciela Borges han escrito testimonios en la web www.isha.com, consigna la investigación publicada por La Diaria.

En Uruguay, el principal centro se encuentra en el balneario Costa Azul de Canelones.

De la inauguración del centro espiritual participó el intendente de Canelones, Marcos Carámbula. La propia Isha se ufana de que en su organización desfilan “desde presos hasta senadores”. La captación de adeptos se hace básicamente a partir de seminarios gratuitos. Un diploma para ser maestro de la disciplina puede costar más de 6.000 dólares, según un reportaje de 2008 en la revista Paula.

En Uruguay, la organización se registró como “Isha educando para la paz”. El MEC observó a la fundación por utilizar el número de registro para certificar la validez de sus diplomas. También posee una empresa importadora que en seis años hizo un solo negocio: la importación de un caballo árabe.

 

Aún no hay comentarios.

Debes estar registrado para poder realizar comentarios. Registrarse