“Consternación” del gobierno ante crimen

En el Consejo de Ministros de ayer, Eduardo Bonomi se refirió al lamentable hecho del fin de semana, cuando un delincuente asesinó a sangre fría a un empleado de La Pasiva.

Mujica solicitó a su más cercano círculo de asesores que visitaran a la familia de la víctima para ponerse a disposición y procurar brindarle una ayuda.

El mandatario manifestó su profunda consternación por el lamentable episodio y pidió que se investigara en profundidad la situación.

Por su parte, Bonomi informó que las autoridades del Ministerio recibieron a una delegación de Cambadu, que planteó la posibilidad de disponer de medidas a favor de los familiares de las víctimas, y que se tienda a mitigar los efectos que producen, sobre todo cuando se trata del fallecimiento del dueño del local, “donde además de la dolorosa pérdida de la vida humana, se pierde al titular de un establecimiento comercial, cuya gestión debe asumirse por sus deudos, en ocasiones, sin experiencia”.

El objetivo es “colaborar con ellos en la gestión de este emprendimiento”. Mujica planteó como meta que cuando no se trate de la muerte del titular del comercio, también se puedan concretar acciones por los familiares y su inserción laboral.

Se creó un grupo de trabajo para evaluar las distintas medidas. Está compuesto por el Ministerio del Interior, el de Trabajo y el de Desarrollo Social.

Asimismo, Bonomi anunció que está a estudio del Ministerio un proyecto del Ley por el cual los reclusos que ganen un salario (no peculio), puedan destinar una parte de su remuneración a un fondo para la atención de necesidades de víctimas de delitos.

Sobre la reciente visita del criminólogo norteamericano, Lawrence Sherman, el secretario de Estado explicó que se generó un debate e intercambio con la Universidad de la República. Resaltó el énfasis que puso el visitante a la inequidad existente en la sociedad como causa del incremento de los delitos.

Por otro lado, el secretario de Estado anunció que se iniciaría hoy el techado del patio donde se encuentran alojados los presos luego del motín y destrucción de varios módulos del Comcar.

Asimismo, informó el comienzo de los trabajos para la construcción de dos módulos para mil reclusos cada uno. Uno de ellos se edificará donde hoy existe un terreno disponible y el otro en el lugar que hoy ocupan los dos módulos destruidos.

Las obras incrementarán en dos mil las plazas carcelarias disponibles y la construcción será de “hormigón armado” lo que reforzará la seguridad del establecimiento carcelario que estaba construido con bloques.

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