Los individuos, tras dominar a varias personas y a sabiendas de que estaban pagando los sueldos, lograron apoderarse de una suma cercana a los cien mil pesos. La fuga la concretaron en un auto a cuyo volante había un quinto hombre.
El local se encuentra ubicado en Asilo y Carlos Crocker, y trascendió que los individuos conocían muy bien los movimientos internos de la empresa.