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TRAS ACCIDENTE
“Teniendo en cuenta las limitaciones que las condiciones meteorológicas y del mar pueden imponer, tomará entre siete y 10 meses eliminar los restos del naufragio”, dijo Franco Gabrielli, director de la agencia de protección civil italiana a la agencia de noticias Ansa.
El mal tiempo ha retrasado las búsquedas y las operaciones de bombeo de combustible.
La extracción del combustible del crucero comenzó el viernes pasado pero tuvo que ser suspendido por el temor de que ocurriera un derrame. Son más de 2.300 toneladas de combustible las que quedan en el crucero y las labores se estima que se reanuden la próxima semana.
La nave de 114.500 toneladas encalló en las rocas de la isla italiana del Giglio, con más de 4.200 personas a bordo. Al menos 17 personas murieron y otras 15 continúan desaparecidas.