Los celos son malos consejeros, así lo demuestra una mujer estadounidense, que luego de mantener una fuerte discusión con su marido, tomó una medida drástica para impedir que el mismo la engañe.
Johnna Woolfolk, de 50 años, se declaró como culpable luego de haber emitido una falsa amenaza de bomba a una aerolínea. La mujer realizó una llamada telefónica informando que en el vuelo que partía del aeropuerto de Los Ángeles con destino a Atlanta, un hombre (su esposo) transportaba una bomba.
Según declaró la mujer a la justicia: “Tuvimos una pelea y llamé a la aerolínea e informé de que tenía una bomba para evitar que tomara el vuelo para ver a otra mujer”.
El hombre finalmente perdió el vuelo al ser detenido por agentes del FBI, aunque la culpa pudo más que los celos y la mujer declaró lo ocurrido, enfrentándose ahora a un juicio que le podría costar una pena de hasta cinco años de prisión.